No Hay Seres Humanos Enemigos

El artículo que  sigue a continuación procede de una charla impartida por Azi Khalili en el Taller de Aliadas para  las Personas Musulmanas, por Zoom, en Noviembre del 2020.

Podemos decir con total confianza que no hay conflictos inherentes entre los seres humanos. Y además podemos afirmar que no hay enemigos entre los seres humanos. Puede que sea difícil  asumir [darse cuenta] de la importancia de todo esto. Pero es un pensamiento revolucionario. 

Esta idea, la de que no hay enemigos humanos, puede cambiar nuestra comprensión del pasado y de todo lo relacionado con el futuro.

Sabemos que ningún ser humano es enemigo de otro ser humano. Sabemos que todos los seres humanos estamos en el mismo bando, que tenemos los mismos intereses, que la forma en que todos los seres humanos se sienten naturalmente unos con otros (en ausencia de angustia) es el amor.

Todo el concepto de "enemigo" es una mentira. Es una invención. Es una ficción. 

Los seres humanos no somos enemigos los unos de los otros.

Todos los problemas a los que nos enfrentamos en el mundo -pobreza, guerras, racismo, otras opresiones, destrucción del medio ambiente- están causados por patrones de angustia instalados en los seres humanos. No son causados por ningún supuesto enemigo.

Pero a la gente que está en el poder, a las que quieren seguir oprimiéndonos y explotándonos, las interesa que creamos que estos problemas son causados por nuestros enemigos. Nos dicen que tenemos enemigos. Manipulan nuestras angustias para que creamos que tenemos enemigos y trabajemos junto a los opresores para acabar con ellos [destruirlos]. Esto es esencial para el funcionamiento de una sociedad opresiva y explotadora. Desgraciadamente, nuestras angustias más tempranas nos preparan [nos predisponen] a ser manipuladas de esta manera.

Sabemos que los seres humanos somos vulnerables a las heridas emocionales. Tras miles de años de sufrir daños y no tener acceso al desahogo, arrastramos enormes cargas de angustia, algunas de las cuales las hemos atribuido a otras personas. A menudo creemos erróneamente en los sentimientos y en los mensajes de la angustia y culpamos a las demás personas de nuestras situaciones difíciles. Necesitamos  buenas sesiones de "Co-Escucha" que nos ayuden a trabajar en las primeras heridas y a drenar la confusión, para poder ver la verdadera realidad de la situación. 

La mayoría de nosotras somos incapaces de librar esas batallas en nuestra mente (contra las grabaciones dejadas por la angustia), por lo que intentamos librarlas en el presente, creyendo que se trata del presente. Apoyadas por los mensajes que recibimos en nuestras sociedades, designamos erróneamente a algunas personas como nuestras enemigas.

Cualquier lugar de nuestra mente en el que sintamos que otro ser humano está separado de nosotras, o es una enemiga, o es inferior a nosotras -cualquier lugar en el que descartemos a alguien [desestimar a alguien como inútil]- es angustia.

En nuestros primeros años de vida, cada una de nosotras se vio obligada a aceptar la separación de las demás y a aceptar que algunas personas eran sus enemigas. Luchamos contra esto, pero finalmente nos rendimos y lo aceptamos.

Podemos trabajar en la separación como el mecanismo por el cual somos manipuladas para creer que hay "otras personas" y que “son mis enemigas”.

Tenemos una espléndida oportunidad de eliminar la angustia que se instaló en nuestras mentes para hacernos sentir separadas de las demás y aceptar ser hostiles a ellas, aceptar que hay seres humanos que son mis enemigos.

Los verdaderos problemas son las condiciones sociales, la falta de acceso al proceso de desahogo y una perspectiva que no está alineada con la realidad.

Tenemos la oportunidad de oponernos a la idea de que hay seres humanos que son nuestros enemigos. Podemos oponernos a la irracionalidad en el presente. Ninguna de nosotras quiere quedar atrapada en el pasado. Queremos utilizar nuestro brillante pensamiento para idear [crear] soluciones flexibles e inteligentes para que ningún grupo de personas sea objeto de aniquilación.

Aclaremos nuestra perspectiva, que no hay enemigos, y pensemos en cómo difundirla en el mundo. 

En tus mini-sesiones, trabaja en tus primeros recuerdos relacionados con aquéllas personas que considerabas como tus enemigas. ¿Quiénes te dijeron que eran tus enemigas? ¿Quién te lo dijo? ¿Qué sentiste cuando te dijeron que tu pueblo tenía enemigos?

Azi Khalili

  • Persona de Referencia Internacional para la Liberación de las Personas 

con Herencia Procedente del Sur, Centro y Oeste de Asia.

  • Brooklyn, Nueva York, Estados Unidos.
  • Re-impreso de la Lista de discusión por correo electrónico 

para las personas que son miembros de la Comunidad de RC.

  • Título original del artículo:  No Human Enemies”.

 

  • Publicado en Present Time: Nº 202.    Enero del 2021
  • Traducción: Fermín Porras en  Euskal Herria / País Vasco

Last modified: 2023-03-20 22:14:44+00